«Mi máxima relación con Dios es cuando cojo olas». Lo afirma Hiucif Rahim. Este brasileño llegó a Asturias en el año 96 invitado por un asturiano al que conoció cuando surfeaba en Hawai. Las olas son su vida. Lo que más le gusta es surfear al amanecer con su familia y, así, dice, mantener una estrecha relación con Dios. « Se lo debemos todo, ya que el ha sido el creador de las olas». Pertenece a la Asociación Cristiansurfer, una agrupación cristiana apoyada en el surf, que se relaciona con Dios a través del deporte.
Hiucif no es solo surfista, construye tablas en su taller de Mareo. También es profesor de este deporte que enseña de una manera especial basada en la esencia de los surferos cristianos. Un enamorado de Gijón que de momento no tiene en mente volver a Santos, su ciudad natal.